El puente que hizo posible que dos comunidades en el Sur de Bolívar trabajaran unidas
El puente que hizo posible que dos comunidades en el Sur de Bolívar trabajaran unidas
Aseguran los habitantes del corregimiento La Virgencita del municipio de San Pablo y de Aguas Lindas, corregimiento de Simití Sur de Bolívar, que hace muchos años no se reencontraban como comunidad; este fin de semana la inauguración del puente financiado por el gobierno de Japón, que une a los dos caseríos fue el motivo para el trabajo en equipo.
Mientras que algunos pobladores se dedicaban a elaboran en papel las banderas de Japón, simultáneamente otro grupo se ocupaba de preparar el almuerzo (sancocho de tres carnes y arroz), un plato típico de la región y además acorde con la ocasión, ya que dentro de los invitados especiales a la inauguración oficial del puente, se encontraban tanto el embajador del país asiático, como la Ministra de Transporte y la directora del Incoder, entre otros, por eso la comunidad madrugó a organizar el espacio y a decorar la mesa principal con productos producidos en el territorio (yuca, arroz, plátano, tomate y hasta toronja), sin embargo motivos de fuerza mayor obligaron a la comisión a cancelar la visita unas horas antes y el evento debió realizarse tal y como estaba previsto, pero sin la presencia de los altos funcionarios, pero eso sí, con la misma alegría y entusiasmos de los anfitriones.
El puente que es de uso exclusivo peatonal tiene 60 metros de largo, fue construido en cuatro meses con estructuras metálicas, vigas en acero, guayas y espolones del mismo material; piso en madera y contrafuertes en concreto, según la firma constructora encargada de la obra, la vida útil del puente puede ser de unos 15 años, siempre y cuando se le haga el mantenimiento preventivo, que estará a cargo de la comunidad, para lo que fue debidamente capacitada.
El puente financiado por el Gobierno de Japón, como aporte al desarrollo de la región, beneficia no solo a los pobladores de los corregimientos de La Virgencita y Aguas Lindas, sino además a los del Paraíso, Patio Bonito, Vallecito, El Jardín y otras veredas aledañas, habitadas por hombres y mujeres que trabajan la tierra, que producen en el territorio el alimento que sale a las ciudades, pero lamentablemente no en grandes cantidades, porque el pésimo estado de las vías de acceso dificultan la cadena de comercialización, que en vez de sumarle ganancias, les genera pérdidas a estas comunidades que últimamente se están viendo obligadas a cultivar para su sustento diario.
La cancha de futbol en el corregimiento de Aguas Lindas, fue acondicionada para el acto protocolario al que asistieron las comunidades, secretarios de despacho de las alcaldías de San Pablo y Simití, al igual que líderes de organizaciones sociales, que desde hace varios años han brindado su apoyo a los pobladores.
Los actos culturales estuvieron a cargo del grupo de danzas del corregimiento el Paraíso; un partido de futbol también hizo parte de la agenda artística, que integró a las comunidades en torno a la inauguración del puente, que aunque había sido construido hace dos años, no se había oficializado su entrega.
Para finalizar la celebración, el Sacerdote Jesuita Joaquín Pachón, bendijo el puente que comunica a los pobladores y por el que se puede transitar libremente sin riego alguno de caer al agua, como lamentablemente ya había ocurrido en otras ocasiones, donde niños y adultos fueron víctimas del deterioro de la antigua infraestructura.